14 de febrero de 2011
15 días contigo, una película de Jesús Ponce 15 días contigo, en una casa sin paredes pero con almas que la habitan, sueños que se pasean dentro de un cubo que limpian los cristales de un pasado que no vuelve, pero que se pega tu piel como la ropa mojada. Vidas invisibles, desdentadas, los bolsillos con unas pocas monedas que tintinean como una marcha fúnebre, la triste rutina del que vive muriendo. Sueños de normalidad, de pedir perdón cuando se te derrama una copa, de levantar la mano para llamar al camarero, saber utilizar una tarjeta, no saber nunca cuanto dinero tienes, sentir que el mundo te mira a los ojos y no se agarra el bolso con fuerza. Abrazar fuerte al amor, incluso al más innecesario, al más inexplicable, al que nadie entiende, al que a nadie importa. Y el mundo te deja aparcar en un lugar prohibido, para que te lloren las venas. Pero un día el mundo resplandece, en las calles te llaman por tu nombre, grita guapa un camarero, te invita a entrar en ese sueño que anhelas, en todo lo que veías detrás del cristal